25 de Mayo de 2010 - Bicentenario

Creo que este 25 de Mayo es una bisagra en la vida de la nación.
Los valores por los que lucharon tantas generaciones de argentinos, Nación, Patria, Pueblo, Igualdad, Bandera, surgieron en una catarata de emociones, comunión y esperanza.
Nadie sabía lo que iba a ocurrir, no hubo planificación, ni cálculo político, el arte del pueblo y su historia nos rompió la cabeza, mirar alrededor y ver la cara de sorpresa, alegría, satisfacción y plenitud de los iguales fue increíble. Oír y cantar el himno junto a 2 millones de personas una experiencia única e inigualable.
¿Saben porque nos quedamos hasta las 2 de la mañana, cuando al otro día todo el mundo tenia que ir a trabajar o los chicos al colegio? Creo que la gran mayoría tenia la necesidad de cantar el himno, de sentirnos argentinos, incluidos, de cantarle al mundo "Oíd mortales el grito sagrado", somos esto, hijos de indios y de inmigrantes, de sabios y bestias americanos, somos latinoamericanos, hijos de un pasado bárbaro y también esplendoroso y civilizado, fruto de miles de errores y aciertos, de nuestra historia, la historia de los que estamos hoy en la plaza, no de la que nos contó una minoria.
Nos quedamos a gritar "Oíd sordos mortales", somos esto, alegría, paz, no violencia, trabajo, arte popular, masa sin forma, unión
Oíd sordos políticos, dirigentes, empresarios, medios de comunicación, periodistas,cerdos gremialistas.
Oíd el grito sagrado, es esto, reaccioná, despertate, respetanos, somos una nación, basta ya de mentiras, de pisoteo, de años de injustica, basta.
Estamos cantando el himno, seguramente como lo cantaron los que lucharon por nuestra independencia, desde las tripas.
Oíd, sordos mortales, oíd.